Leo en los periódicos esa noticia
La FAO (Organización Mundial para la Agricultura y la Alimentación) insiste en un documento que comer insectos podría ser la solución al hambre en el mundo, la obesidad de los países desarrollados y al medio ambiente.
Y automáticamente visualizo, ahora que época de emprendedores, mi negocio: Restaurante Entomofagia.
Solo imaginarme la variedad de platos (los insectos son el grupo de animales más diverso de la Tierra, con más de 800.000 especies), me hace relamerme. Además podría criarlos yo mismo en la cocina, bastaría con no limpiar, y seguro que salen muy económicos.
Ya en serio, ¿por qué la FAO no se dedica a denunciar que hay bastante comida en el mundo para todos, que en los países ricos tiramos toneladas de comida cada día que se podría consumir, o que hay cantidades ingentes de arroz y trigo almacenados y sin entrar a la cadena de distribución para mantener el precio de estos?
No, eso sería luchar contra un enemigo demasiado poderoso: los mercados. Es más fácil decir a los que no tienen nada que deben variar su alimentación y comer lo que los ricos no quieren.
Publicado con Blogsy
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